La prueba de la densidad mineral ósea (BMD, por sus siglas en inglés) ofrece una imagen instantánea de la salud de los huesos que permite identificar la osteoporosis, determinar el riesgo que corre un paciente de fracturarse un hueso y medir la respuesta a un tratamiento para la osteoporosis.

Dra. Susana GerechterDra. Susana Gerechter

Esta prueba no causa ningún dolor y mide la densidad ósea de la cadera o de la columna lumbar, comparándola con la de una norma estándar y estableciendo una calificación para el paciente.

Tal y como señala la Dra. Susana Gerechter, Jefa de Servicio de Reumatología, la instalación de un nuevo software en el densitómetro digital del que dispone el Centro, "permite una mayor precisión en el diagnóstico de la osteoporosis, de forma que la medición es más exacta".

Además, destaca Gerechter, la actualización del software va a aportar una serie de ventajas adicionales:

  • Permite mejorar la medición morfométrica de la columna lateralmente, superando algunas limitaciones que se daban hasta ahora, tales como la detección de deformidades leves o la reducción de falsos positivos.
  • Permite evitar los artefactos que producen las placas de ateroma de la aorta -acumulación de desechos en las arterias- y evitar la artrosis facetaria de las vértebras, que se produce por la degeneración del cartílago. Esto se debe a que mide sólo el cuerpo vertebral
  • Además, permite detectar aplastamientos laterales de las vértebras que no han dado síntomas, por lo que en muchos casos son indetectables (hasta el 26% de las fracturas vertebrales son asintomáticas).
  • Permite aplicar un tratamiento personalizado para cada paciente porque el diagnóstico es mucho más preciso.