Higiene del sueño
15 de julio de 2019 /
				Complejo hospitalario Ruber Juan Bravo /
			Endocrinología y Nutrición
Un estilo de vida activo y hábitos alimentarios saludables ayudan a descansar mejor. La mayor parte de reglas para una correcta higiene del sueño son sencillas y de sentido común, pero se requiere de constancia para obtener buenos resultados.

- Limita el consumo de excitantes como el té, café, refrescos con cafeína, especialmente después de media tarde; así como el alcohol.
 - Realiza una cena ligera, si es posible, por lo menos dos horas antes de acostarte.
 - Procura levantarte y acostarte todos los días a la misma hora.
 - Evita el uso de pantallas (móvil, Tablet, ordenador…) por la noche. La luz LED le dice al cerebro que esté despierto.
 - Sino es posible, reduce el brillo de las pantallas o activa el modo luz nocturna.
 - El dormitorio debe de tener una temperatura agradable y bien ventilado.
 - Crea tu propia rutina de noche: escucha música relajante, date una ducha con agua templada, prepara la ropa y las cosas que necesiten para el día siguiente… Repetir estas cosas como un hábito le indican a tu cuerpo que es la hora de dormir.
 - La cama no es un lugar para resolver problemas. Anota en una libreta las cosas que tienes que hacer al día siguiente o que te preocupen para vaciar tu mente.
 - Practicar deporte y llevar un estilo de vida activo ayuda a descansar mejor, pero hay que tener en cuenta una serie de consideraciones:
 
- No hacer ejercicios de alta intensidad a última hora del día, si es posible, mejor realizarlos por la mañana.
 - Hacer ejercicios de relajación o alguna meditación guiada para antes de dormir.
 
Si tu problema es que no duermes por estrés o ansiedad acude a un psicólogo para que te ayude a gestionar estas emociones




















